Una estrategia que está emergiendo para las empresas proveedoras de
software consiste en proveer acceso vía web al software. Para
aplicaciones previamente distribuidas, como las aplicaciones de
escritorio, se puede optar por desarrollar una aplicación totalmente
nueva o simplemente por adaptar la aplicación para ser usada con una
interfaz web. Estos últimos programas permiten al usuario pagar una
cuota mensual o anual para usar la aplicación, sin necesidad de
instalarla en el ordenador del usuario. A esta estrategia de uso se la
denomina Software como servicio y a las compañías desarrolladoras se les denomina Proveedores de Aplicaciones de Servicio (ASP por sus siglas en inglés), un modelo de negocio que está atrayendo la atención de la industria del software.